Praga: qué ver y qué hacer

Praga es una de esas ciudades que sorprende aunque hayas visto mil fotos antes de visitarla. Pasear por sus calles es como viajar en el tiempo: entre plazas medievales, iglesias góticas y rincones con mucha historia, siempre hay algo nuevo que descubrir.

Tras varios años queriendo ir y acabar posponiendo el viaje en varias ocasiones, por fin he podido visitarla. Y ha sido una muy buena experiencia que intento plasmar aquí.

En este artículo, te cuento qué ver en Praga, con los lugares imprescindibles que no deberías perderte según mi experiencia y algunos rincones que merecen la pena si quieres ir un poco más allá de lo típico. Así podrás organizar tu viaje de forma sencilla y disfrutar la ciudad sin perderte lo mejor.

Qué ver en Praga 👀

Vamos a empezar por los lugares imprescindibles que ver en Praga para un viaje top.

Los lugares que ver en Praga imprescindibles 👌🏽

Plaza de la Ciudad Vieja

Plaza de la Ciudad Vieja, uno de los lugares que ver en Praga.

Esta plaza, conocida como Staroměstské náměstí en checo, es el centro neurálgico de Praga y probablemente el primer lugar que vas a pisar en tu viaje a esta ciudad.

Aquí, la vida fluye entre terrazas, edificios históricos de estilo gótico, barroco yrenacentista y, quizás, algún evento. Además, aquí se reúnen monumentos imprescindibles como el Reloj Astronómico de Praga (en el Ayuntamiento Viejo), o la Iglesia de Týn.

Si puedes, visítala tanto de día como de noche. Con la iluminación nocturna, el ambiente cambia por completo y la plaza se vuelve casi mágica. No cabe duda de que es uno de los lugares que ver en Praga imprescindibles.

Puedes conocer todos los lugares destacados de la ciudad haciendo este tour de Praga al completo.

Reloj Astronómico de Praga

Reloj Astronómico, uno de los lugares que ver en Praga.

En una de las esquinas de la plaza, en la torre del Ayuntamiento Viejo, encontrarás el famosísimo Reloj Astronómico de Praga, o Staroměstský orloj en checo. Es una obra maestra del siglo XV que ver en Praga y que no te puedes perder.

Cada hora en punto, hay un desfile mecánico, con los doce apóstoles apareciendo en ventanitas. Es uno de los espectáculos más vistos de la ciudad.

Al ser de las atracciones más visitadas, se llena de gente rápido. Te recomiendo que te acerques unos minutos antes de la hora para encontrar un buen ángulo.

Por cierto, también puedes subir a la torre del Ayuntamiento para disfrutar de unas vistas espectaculares sobre los tejados rojos de Praga.

Si quieres comprar la entrada a la torre con antelación para asegurarte la disponibilidad, puedes hacerlo directamente desde aquí.

Iglesia de Týn

Iglesia de Týn, uno de los lugares que ver en Praga

Las dos torres góticas de la Iglesia de Nuestra Señora de Týn, o Týnský chrám, se asoman como guardianas silenciosas sobre la Plaza de la Ciudad Vieja. De día parecen sacadas de un cuento oscuro, y de noche, iluminadas, ganan todavía más protagonismo en el skyline de Praga.

En el interior, encontrarás un bonito contraste con el exterior. Mientras que por fuera impone con su aire medieval, dentro es de estilo barroco recargado, con altares dorados y frescos.

La entrada a esta iglesia está algo escondida, entre edificios colindantes. Así que fíjate bien o puede que te pases de largo. La visita suele ser rápida, pero merece mucho la pena entrar para disfrutar del ambiente recogido y escuchar algún concierto de órgano si coincides.

Puente de Carlos

Puente de Carlos, uno de los lugares que ver en Praga.

El Karlův most es otro de los lugares que ver en Praga imprescindibles. Cruzarlo sobre el Moldava es una experiencia. Con sus 500 metros de largo y vigilado por más de 30 estatuas barrocas, es el paseo más icónico de la ciudad.

Mientras lo cruzas, podrás disfrutar de vistas al Castillo al fondo por un lado y la torre del puente, por el otro. Suele haber músicos callejeros o artistas poniendo banda sonora a tu paseo, así como artistas y puestos de artesanía que le dan un aire bohemio.

De día, es un hervidero de turistas. De madrugada o al anochecer, el ambiente es más tranquilo e íntimo, con las farolas encendidas y la ciudad aún medio dormida o preparándose para la noche. Puedes aprovechar estas horas si prefieres verlo con menos gente.

Por cierto, no te vayas del puente sin tocar la placa de San Juan Nepomuceno, el santo checo que arrojaron desde este mismo puente. La tradición dice que quien lo hace volverá algún día a Praga (y créeme que querrás volver).

Una forma de llegar fácilmente a todos los lugares de interés es con el autobús turístico. En Praga, tienes el Big Bus y también el Hop On Hop Off.

Castillo de Praga

Castillo de Praga, uno de los lugares que ver en Praga

El Castillo de Praga, Pražský hrad, no es un castillo cualquiera: es casi una ciudad dentro de la ciudad. De hecho, está considerado como el castillo antiguo más grande del mundo. Ya solo por eso, tiene que estar en tu lista de lugares que ver en Praga.

Sus murallas en lo alto de la colina han visto pasar reyes, emperadores y presidentes, y hoy siguen siendo el símbolo del poder checo. Pasear por sus patios y callejuelas es como hojear un libro de historia a cielo abierto.

Dentro, te esperan palacios renacentistas, torres medievales y jardines escondidos que ofrecen algunas de las mejores vistas sobre los tejados rojos de Praga. Además, dentro del castillo está la Catedral de San Vito, de la que te hablo enseguida.

Si quieres vivirlo con calma, reserva al menos una mañana entera, porque la subida a pie te llevará algo de tiempo. Ah, no te pierdas el cambio de guardia. Hacen un pequeño ritual frente al altar de los reyes. Son solo unos minutos, pero el espectáculo tiene su gracia.

Si quieres conocer mejor esta edificación, puedes hacerlo con esta visita guiada por el Castillo de Praga.

Catedral de San Vito

Catedral de San Vito, uno de los lugares que ver en Praga.

En el corazón del Castillo de Praga se alza la majestuosa Catedral de San Vito, Katedrála Svatého Víta, otra de las que ver en Praga. Es un templo gótico con torres puntiagudas que dominan el perfil de la ciudad y, de cerca, impresionan tanto que te obligan a detenerte y levantar la vista una y otra vez.

El interior no se queda atrás: vidrieras que filtran la luz en mil colores, un enorme rosetón y la Capilla de San Wenceslao, adornada con piedras semipreciosas. Cada rincón está cargado de simbolismo.

Además, puedes subir a la torre principal (sí, son unos cuantos escalones, ¡pero vale la pena!). Desde arriba tendrás una de las panorámicas más espectaculares de Praga, con los tejados rojos extendiéndose hasta perderse en el horizonte.

Casa Danzante

Casa Danzante, uno de los lugares que ver en Praga.

Otro de los lugares más curiosos que ver en Praga es la Casa Danzante, o Tančící dům. Entre los edificios clásicos del centro, de pronto aparece este edificio rompiendo todos los esquemas.

La diseñó Frank Gehry y Vlado Milunić en los años 90 y es una obra moderna que juega con curvas que recuerdan a una pareja bailando: por eso también se la conoce como Fred & Ginger.

La fachada de cristal parece moverse mientras la miras, y aunque en su momento generó polémica por lo diferente que era al entorno, hoy es uno de los iconos de la Praga contemporánea. Dentro hay oficinas, una galería y un restaurante panorámico con vistas al Moldava.

También puedes subir a la terraza del último piso. Desde ahí, tendrás una de las mejores panorámicas del río y el Castillo de Praga al fondo. Además, suele ser un «mirador» mucho menos concurrido que otros más turísticos.

Callejón del Oro

Callejón del Oro

El Callejón del Oro es uno de los sitios que ver en Praga menos conocidos, pero muy curioso. Sus casitas en miniatura, pintadas en tonos pastel, parecen sacadas de una maqueta infantil.

En su día, estas casas fueron hogar de orfebres, guardias del castillo e incluso de Franz Kafka, que vivió en la casa número 22. Hoy en día, muchas son pequeñas tiendas y museos que conservan el espíritu de otra época.

El callejón debe su nombre a los alquimistas que, según la leyenda, intentaban transformar metales en oro en estas diminutas viviendas. Aunque la realidad fue menos mágica (eran en su mayoría artesanos), el lugar sigue conservando ese aura misteriosa que te hace caminar despacio y mirar cada detalle.

Si quieres evitar las aglomeraciones, ve temprano o a última hora de la tarde. Está dentro del recinto del Castillo de Praga y, en las horas centrales, puede llenarse mucho. Llévate calzado cómodo: hay suelo empedrado.

Iglesia de San Nicolás

Iglesia de San Nicolás, uno de los lugares que ver en Praga

En el corazón de Mala Strana (casco antiguo) se esconde una de las joyas barrocas más impresionantes de Europa: la Iglesia de San Nicolás, Kostel svatého Mikuláše. Desde fuera ya impacta su enorme cúpula verde, que destaca en el paisaje del barrio. Pero es al entrar cuando de verdad te deja sin palabras.

El interior es un espectáculo de frescos, estucos dorados y mármoles que parecen multiplicarse hacia lo alto. Cada rincón está pensado para impresionar: el órgano, que llegó a tocar Mozart, todavía resuena en conciertos que hacen que la experiencia sea mágica y una de las que ver en Praga.

Si subes a la torre del campanario tendrás una de las mejores vistas sobre Mala Strana y el Puente de Carlos. Eso sí, prepárate para unas buenas escaleras, ¡pero el esfuerzo merece la pena!

Barrio Judío

El Barrio Judío de Praga, conocido como Josefov, es mucho más que un conjunto de sinagogas: es un lugar cargado de memoria, cultura y leyendas. Caminar por Josefov es viajar a la historia de la comunidad judía que vivió aquí durante siglos, con luces y sombras que todavía se sienten en cada rincón.

El punto más sobrecogedor es el Antiguo Cementerio Judío, donde miles de lápidas se amontonan en un pequeño espacio. Muy cerca, está la Sinagoga Vieja-Nueva. Es una de las más antiguas en funcionamiento de Europa y, según la leyenda, todavía guarda en su desván al mítico Golem de Praga.

Dedícale al barrio al menos un par de horas y, si puedes, hazlo a primera hora de la mañana. Así disfrutarás con más calma antes de que lleguen los grupos turísticos.

Si quieres conocer los detalles y secretos de este barrio, puedes hacerlo con este tour por el barrio Judío, que, además, incluye la entrada a varias sinagogas.

Torre de la Pólvora

Torre de la Pólvora

La Torre de la Pólvora, Prašná brána, es una de las antiguas puertas de entrada a la Ciudad Vieja y, aunque hoy ya no cumple su función defensiva, sigue siendo uno de los símbolos más reconocibles que ver en Praga.

Su aspecto gótico, oscuro y robusto le da un aire misterioso que contrasta con la elegancia de la cercana Casa Municipal. Se construyó en el siglo XV y debe su nombre a que en el XVII se utilizó como almacén de pólvora.

Hoy, puedes subir sus 186 escalones y llegar al mirador, desde donde tendrás una vista privilegiada del centro histórico y de la avenida Na Příkopě, una de las calles comerciales más animadas de la ciudad.

Si te animas a subir, hazlo al atardecer. La vista de los tejados iluminándose poco a poco es una forma mágica de empezar la noche.

Fortaleza Vyšehrad

A unos minutos del centro se esconde la Fortaleza Vyšehrad, lugar que ver en Praga que muchos viajeros y viajeras pasan por alto y que, sin embargo, ofrece una experiencia auténtica. Está situada sobre una colina junto al Moldava y combina historia, tranquilidad y unas vistas espectaculares.

Entre sus murallas encontrarás la Basílica de San Pedro y San Pablo, con sus torres neogóticas visibles desde lejos, y el cementerio de Vyšehrad, donde descansan figuras célebres de la cultura checa como Dvořák o Smetana.

Te recomiendo ir al atardecer. El sol cayendo sobre el río y los tejados de Praga es un espectáculo mucho más tranquilo y auténtico que otros miradores más concurridos. Pasear por sus senderos arbolados es un respiro después del ajetreo del centro.

Arte y cultura de Praga 🎨

Museo Nacional de Praga

Museo Nacional de Praga

En lo alto de la Plaza de Wenceslao se levanta el majestuoso Museo Nacional de Praga, un edificio neorrenacentista que ya impresiona solo con su fachada y su gran cúpula.

Es uno de los símbolos culturales de la ciudad y un lugar perfecto para sumergirte en la historia y la identidad checa. Por eso, es uno de los museos imprescindibles que ver en Praga.

Dentro del Národní muzeum, encontrarás colecciones que van desde arqueología y paleontología hasta minerales, historia natural y etnografía. Además, estas exposiciones se encuentran en salas espectaculares, con mármol, frescos y una escalera monumental que merece la foto sí o sí.

Aunque el museo es enorme y podrías pasar horas en él, si no tienes demasiado tiempo, céntrate en el edificio histórico y en las salas principales. Además, desde la escalinata de la entrada tendrás buenas vistas de la Plaza de Wenceslao.

Museo del Comunismo

El Museo del Comunismo, o Muzeum komunismu, es un viaje directo a la Checoslovaquia de la posguerra. Está ubicado cerca de la Plaza de Wenceslao y recrea cómo era la vida cotidiana bajo el régimen comunista: desde las aulas escolares hasta una típica tienda de alimentación con estantes vacíos.

La exposición combina objetos originales, fotos, vídeos y documentos que muestran tanto la propaganda oficial como la dura realidad diaria. Uno de los espacios más impactantes es la sección dedicada a la Primavera de Praga de 1968 y a la Revolución de Terciopelo de 1989, que marcó el fin del régimen.

No es un museo enorme, pero sí uno de los que ver en Praga. En poco más de una hora puedes recorrerlo entero. Lo ideal es visitarlo después de pasear por la Plaza de Wenceslao, para conectar los lugares históricos con lo que aquí se explica.

Si quieres más información sobre otros museos interesantes que ver en Praga, te recomiendo leer el siguiente artículo detallado que he escrito al respecto.

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Las zonas verdes de Praga 🌳

Colina de Petrín

Colina de Petrín

La Colina de Petrín es el gran pulmón verde de Praga y uno de los lugares favoritos de los locales para pasear, hacer picnic o escapar del bullicio del centro. Subir hasta la cima ya es una experiencia en sí: puedes hacerlo a pie, por senderos rodeados de jardines y árboles, o coger el funicular desde Malá Strana.

Arriba, te espera la Torre de Petrín, una especie de “mini Torre Eiffel” construida en 1891, desde la que tendrás una de las panorámicas más completas de la ciudad. El conjunto se completa con un laberinto de espejos (ideal si viajas con niños/as o con ganas de reírte un rato) y senderos románticos.

Es recomendable subir a última hora de la tarde y quedarte para ver el atardecer. El sol tiñendo de dorado los tejados y el Castillo de Praga al fondo es una de esas imágenes que no se olvidan.

Jardines de Mala Strana

Mala Strana no es solo un barrio de iglesias y callejuelas pintorescas: también guarda algunos de los jardines más bonitos de Praga.

El Jardín Wallenstein, con sus estanques, estatuas y un pabellón barroco, es un oasis perfecto para descansar después de recorrer el barrio. Si tienes suerte, incluso podrás encontrarte con los pavos reales que pasean a sus anchas entre los setos.

Otro imprescindible son los Jardines del Palacio Vrtba, un espacio elegante en terrazas desde donde obtendrás unas vistas únicas sobre los tejados rojos y las torres de la ciudad. No son tan conocidos como otros miradores, así que suelen ser más tranquilos: perfectos para disfrutar sin prisas.

Los jardines suelen abrir solo de primavera a otoño, así que si viajas en invierno probablemente los encuentres cerrados. Mi recomendación es visitarlos al final de la tarde, cuando la luz es más suave y la ciudad se ve bañada en tonos dorados.

En caso de que planifiques visitar varios de los monumentos que ver en Praga cuya entrada no sea gratuita, puede que te interese comprar una tarjeta turística. En Praga, tienes estas dos opciones:
Prague Visitor Pass: incluye transporte ilimitado y entradas a lugares como el Antiguo Ayuntamiento con el Reloj Astronómico, el Castillo de Praga, la Torre de la Pólvora, varios tours y un Crucero por el río Moldava, entre otros.
Prague CoolPass: incluye entradas a lugares como el Castillo de Praga, la Catedral de San Vito, varios museos, el alacio Lobkowicz, tours, el bus turístico y un crucero por el río Moldava, entre otros.

Si quieres aprovechar tu visita a Praga para ver algunos pueblos cercanos o del resto del país, tengo este artículo para ti con información sobre ello.

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Mapa de lugares que ver en Praga y alrededores

A continuación, te dejo un mapa con los lugares que ver en Praga en 3 días o 4 (o más si puedes) que he ido mencionando en el artículo, para que te puedas planificar bien la visita.

Más info interesante para visitar Praga

¿Dónde alojarse en Praga? 🏨

Como en todo viaje, elegir bien dónde alojarte es importante. La ciudad tiene barrios céntricos, encantadores y bien conectados. Lo ideal es escoger una zona desde la que puedas caminar a la mayoría de los lugares que ver en Praga. Esto te ahorrará tiempo en los desplazamientos.

En líneas generales, los barrios más recomendables para dormir son: Staré Mesto (Ciudad Vieja), el corazón histórico de la ciudad, perfecto para estar cerca de lugares interesantes; Nové Mesto (Ciudad Nueva), un área moderna con buena comunicación y precios más accesibles; y Josefov (Barrio Judío), pequeño pero cargado de historia y con buena oferta de restauración.

Si buscas algo un poco más tranquilo y con encanto, Malá Strana es una alternativa ideal. Es pintoresco y está muy cerca del Castillo de Praga. Aunque está un poco más alejado del núcleo, tiene su propio ambiente bohemio.

En nuestro caso, nos alojamos en el Hotel Theatrino, no muy lejos de la estación central y del centro de la ciudad.

Para ver las opciones concretas y los precios en las fechas en las que te interesa viajar, puedes buscar directamente en Booking:

Si quieres conocer más detalles sobre los diferentes barrios, así como recomendaciones de alojamientos interesantes, echa un vistazo al siguiente artículo:

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donde alojarse en Praga

Dónde alojarse en Praga

¿Cómo moverse por Praga? 🚌

Praga es una ciudad muy amigable para recorrer andando, sobre todo, las zonas más céntricas. Pero, dependiendo de dónde te alojes o de cuál sea tu situación (y para llegar a algunos lugares que ver en Praga), es probable que necesites el transporte público.

En la ciudad, dispones de estos transportes:

  • Metro: funciona todos los días de 5:00 h a 00:00 h
  • Tranvía: líneas diurnas de 4:30 h a 00:00 h, y nocturnas de 00:00 h y las 4:30 h
  • Autobús: líneas diurnas de 4:30 h a 00:00 h, y nocturnas de 00:00 h y las 4:30 h

Muy pronto tendrás aquí el artículo dedicado al transporte de la ciudad, con mucha más información y detalles para que no tengas ningún inconveniente.

¿Qué comer en Praga? 🍲

La gastronomía checa es bastante variada y contundente. Aunque no sea de las mejores del mundo o de las más conocidas, merece la pena que pruebes algunas de sus comidas tradicionales durante tu viaje.

En sus platos típicos, tienes desde sopas como la česká bramboračka, quesos como el smažený sýr o platos principales como el vepřo-knedlo-zelo, el svíčková na smetaně o el guláš, en la versión checa. Tampoco faltan dulces como el trdelník o el ovocné knedlíky.

Si quieres más información sobre estos y otros platos, te recomiendo echar un vistazo al siguiente artículo donde te lo cuento todo.

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que comer en República Checa

Comida típica de República Checa: qué comer y beber

¿Qué tiempo hace en Praga? ☀️

El clima de Praga es un clima semicontinental. A lo largo del año, las temperaturas oscilan entre -3 °C y 25 °C. En raras ocasiones baja a menos de -12 °C o sube a más de 31 °C.

Los veranos son cómodos, con máximas medias superiores a los 20 °C. El mes más cálido del año es julio, con una temperatura máxima media de 24 °C y una mínima de 14 °C.

Los inviernos son muy fríos, con nieve y ventosos, con máximas medias por debajo de 6 °C. El mes más frío del año es enero, con una temperatura mínima media de -3 °C y una máxima de 2 °C.

En cuanto a precipitaciones, los meses en los que menos llueve son de octubre a marzo, aunque de noviembre a marzo suele nevar.

☀️ Mejor época para visitar Praga

En resumen, la mejor época para viajar a Praga y poder aprovechar al máximo los días es desde principios de junio hasta finales de septiembre. Aunque puede que caiga algún chaparrón, las temperaturas son más agradables y los días más largos para disfrutar de todo lo que ver en Praga.

Resumen de enlaces importantes

✈️ Transporte a Praga: encuentra el transporte para desplazarte hasta Praga en Omio.

🏨 Alojamiento: encuentra alojamiento barato para tu viaje a Praga en Booking.

🏥 Seguro: no te la juegues y contrata un buen seguro de viajes con la aseguradora IATI.

🚙 Alquiler de coche: si necesitas alquilar un coche para tu viaje, mira en DiscoverCars.

🚏 Free tour: conoce la ciudad a fondo haciendo un free tour por Praga.

💳 Tarjeta turística: consigue descuentos en tus entradas con la Prague Visitor Pass.

🚌 Autobús turístico: recorre los lugares más destacados con el bus turístico de Praga.

🖼️ Museos: conoce los más interesantes y su info en el artículo sobre los museos de Praga.

🏨 Dónde alojarse: recuerda los mejores barrios y hoteles del artículo sobre dónde alojarse en Praga.

🏠 Pueblos: recuerda que puedes visitar alguno de los pueblos más bonitos de República Checa.

🍽 Gastronomía checa: puedes ver los platos típicos en mi artículo de la qué comer en República Checa.

🇨🇿 Guías: si tienes pensado visitar otras ciudades, mira la sección de qué ver en República Checa.

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