Formas de alquilar un coche para viajar

Alquilar un coche para viajar es una de las mejores formas de moverse libremente. También puedes necesitar un vehículo para hacer un desplazamiento concreto o para hacer trayectos habituales, para lo que tendrás también opciones muy interesantes de alquiler.

En este artículo, te voy a hablar de varias de las opciones que hay disponibles hoy en día, que son las más usadas y las más ventajosas, dependiendo de tus necesidades. Si vas a necesitar desplazarte en coche pronto, ¡te recomiendo que sigas leyendo este artículo!

Las formas de alquilar un coche para viajar 🚗

Como ya sabrás, existen varios métodos de alquiler de coche para viajar y para otros tipos de desplazamientos. A continuación, vamos a ver los más prácticos y que te podrán servir en varios tipos de situaciones.

Alquilar un coche con conductor/a

Una de las opciones que más se utiliza para alquilar un coche para viajar o, al menos, para ciertos desplazamientos, es el alquiler con conductor o conductora. Este servicio se suele contratar mucho para hacer ciertos desplazamientos. En el ámbito de los viajes, para ir del aeropuerto al hotel o viceversa, por ejemplo.

Estos alquileres son muy comunes y se pueden hacer en varias plataformas. Una de las más habituales y la que yo suelo utilizar es Civitatis. Puedes reservar el trayecto, la hora y el número de plazas. Dependiendo de todo esto, el precio será mayor o menor.

Es similar al taxi, solo que, en este caso, no tendrás que preocuparte de encontrar uno al llegar al destino, ya que te estará esperando en el punto acordado. Y, también, sabrás de antemano el precio del trayecto. Por lo general, ya lo habrás pagado al hacer la reserva.

En este caso, merece la pena que investigues un poco lo que suele costar el mismo trayecto en taxi y compararlo con el precio del alquiler, para ver cuál sería más rentable.

También debes fijarte si es una zona en la que suele haber taxis o transporte público a la hora en la que vas a desplazarte. De este modo, podrás descartar opciones y ver si el traslado privado es lo que necesitas.

Alquilar un coche por libre

Otra de las formas más comunes de alquilar un coche para viajar es acudir a una empresa de alquiler de coches o vehículos. Estos suelen ser alquileres de períodos largos (a partir de un día) y de vehículos variados, casi de todo tipo.

Con este alquiler, el cliente o clienta dispone del vehículo completamente para su uso las 24 horas del día durante el período que ha contratado. La ventaja de este tipo de alquiler es que dispones del vehículo en cualquier momento.

Con este método, lo que sí que tienes que revisar bien es el seguro que incluye tu alquiler (recomendadísimo que sea a todo riesgo), así como otras características. De este modo, te aseguras de que, pase lo que pase, estará cubierto por el precio que pagas.

También debes prestar atención a características como el número de conductores incluidos o las condiciones en las que tienes que devolver el coche (nivel del depósito, la hora exacta o la oficina concreta, por ejemplo). Esto evitará que tengas sorpresas.

Si te interesa este tipo de alquiler, puedes mirar en el comparador de RentalCar para ver las distintas opciones de las empresas disponibles en cualquier destino.

Carsharing

Por último, otra de las opciones que hay es el carsharing, que no hay que confundir con el carpooling (compartir coche a la vez con otras personas). Es similar al alquiler de coches por libre, pero con algunas diferencias que lo pueden hacer más interesante según la situación.

Este servicio consiste en una flota de vehículos distribuidos por la ciudad y que está disponible para los clientes. Por regla general, se pueden alquilar desde períodos de tiempo cortos, como minutos, hasta períodos largos, como un día completo (o más, dependiendo de la compañía).

El alquiler se suele tener que hacer con algo de antelación a través de una aplicación o por internet. Luego, se paga únicamente por el tiempo que se ha usado el vehículo o por los kilómetros recorridos.

Para que te hagas una idea, funciona como el alquiler de patinetes que se puede hacer en varias ciudades. Los coches están estacionados por la ciudad y solo tienes que buscar el más cercano para reservarlo para hacer tu trayecto. Luego, estará disponible para otra persona.

La gran ventaja de este método es que te permite reducir el coste del alquiler, ya que únicamente pagas por el tiempo que lo usas. Si lo necesitas un par de horas, no hará falta que lo alquiles un día entero.

Este tipo de alquiler es también muy interesante para personas locales que no tienen vehículo propio, pero deben hacer desplazamientos para ir a trabajar, a reuniones o a otras actividades. De este modo, cuentan con un coche privado, pero sin tener que afrontar los gastos de tener uno en propiedad. Viene muy bien en casos en los que el transporte público no llega, por ejemplo.

Acceder al carsharing es sencillo. Por lo general, solo tienes que registrarte en la empresa en cuestión, presentar los documentos (como el carné de conducir) y aceptar las normas y condiciones que indiquen.

Como ves, esta es una forma de alquilar un coche para viajar práctica para moverte por una ciudad donde el transporte público no es muy eficaz. Y también es un buen transporte para desplazamientos de personas locales que no cuentan con vehículo propio.

Estas son las formas más comunes y beneficiosas que hay hoy en día para alquilar un coche para viajar o para hacer otro tipo de trayectos cotidianos. ¿Los conocías todos? ¿Cuál prefieres para tus desplazamientos? ¡Cuéntanos tu experiencia en los comentarios!